Autos en Argentina: Una nueva era con la desregulación de importaciones
La reciente eliminación de las SIRAs (Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones) en Argentina ha marcado un hito en el mercado automotriz, generando expectativas sobre la posibilidad de acceder a vehículos más variados y competitivos. No obstante, la desregulación plantea interrogantes sobre cómo afectará a los precios y a qué grado se verá influenciado por los aranceles vigentes.
Apertura digital de trámites:
El Decreto que respalda la desregulación de importaciones no sólo aborda la eliminación de las SIRAs, sino que también busca agilizar los procesos burocráticos. A partir de ahora, los trámites de inscripción y transferencia de vehículos podrán realizarse de forma digital ante la Dirección Nacional del Registro de la Propiedad Automotor (DNRPA). Esta medida tiene como objetivo simplificar y digitalizar integralmente los procedimientos, eliminando trabas innecesarias que históricamente dificultaron la circulación de vehículos.
Reformas en el Congreso:
La propuesta que se plasmó en el Decreto presidencial ya era objeto de debate en el Congreso, donde la diputada Patricia Vásquez presentó un proyecto de Ley para una reforma profunda del sistema. Esta iniciativa busca modernizar y adaptar el Régimen Jurídico del Automotor a las necesidades actuales del mercado argentino.
Impacto en importadores y fabricantes:
Durante los últimos dos años, los importadores se vieron limitados en la variedad de modelos que podían traer al país, enfrentando restricciones en las SIRAs. Esta situación afectó incluso a fabricantes locales que tenían planes de lanzamiento. La eliminación de las SIRAs ha desbloqueado el camino para importadores y fábricas, permitiéndoles ofrecer un portafolio más amplio de vehículos.
Competencia regional y precios:
Con la apertura a las importaciones, se espera una entrada más fluida de unidades del Mercosur, especialmente de Brasil, que solo tributarán el 17,5% del impuesto PAIS y mantendrán un arancel de importación del 0%. Esto podría generar una competencia similar a la experimentada hace dos años, beneficiando a los consumidores argentinos con una variedad de opciones. Sin embargo, los autos importados de extra zona seguirán enfrentando el 35% de arancel, lo que podría mantener sus precios elevados.
Perspectivas futuras:
La desregulación de importaciones promete cambios significativos en el mercado automotriz argentino. Se espera que la competencia entre vehículos nacionales y regionales se intensifique, llevando a una potencial reducción de aranceles que podría hacer más accesibles los autos importados. A medida que evoluciona la situación, los consumidores podrían beneficiarse de una mayor diversidad de modelos y precios más competitivos.
En resumen, la desaparición de las SIRAs y la apertura a las importaciones marcan un nuevo capítulo en la industria automotriz argentina, ofreciendo oportunidades y desafíos para importadores, fabricantes y, sobre todo, para los consumidores que buscan opciones más accesibles y variadas.